Te doy las gracias, alquimista de miedos
Por tus lágrimas
Por tu llanto
Por ese dolor que desgarra
Por ese grito eufórico
Por esa corrida desaforada
Por esa danza sublime
Por es nombre pronunciado como nunca
Por esa cunita milagrosa
Por tu vulnerabilidad
Por tu honestidad
Por el valor
Por tu mirada
Por perderte en tu laberinto para encontrarte
Por enseñarme el camino
Gracias por tu compromiso
Gracias por animarte
Gracias por animarme
RUBEN ARIAS (2006)
(Un regalo nacido del interminable hilo de Ariadna)