A la vida hay que crearla todos los días
Todas las mañanas al salir es necesario
Afinar un instrumento desconocido
Inventar algún sonido nuevo.
Después, pintarle algún color
Que tampoco se haya visto nunca
Sobre el mundo.
Tal vez así, la vida,
Nos devuelva una partecita,
Una pequeña parte, al menos
De aquella música infantil
Que creíamos eterna.
Una ilusión cualquiera
Un “pedazo de paraíso”.
Marta Bruno